martes, 27 de noviembre de 2007

THE WEST COAST


Hace ya unos dias, y es que mi viaje va un poco adelantado respecto a lo que voy publicando, estuve recorriendo parte de la costa oeste de la isla sur. La carretera transcurre entre las montanas y el Mar de Tasmania y pasa por zonas de naturaleza salvaje, como el Pararoa National Park y pequenos pueblos semidesiertos que vivieron tiempos mejores.

Muchos de estos pueblos tenian bastante mas poblacion a mediados del siglo XIX que ahora. Esto se debe a la fiebre del oro que hizo llegar a los primeros pioneros que se fueron asentando por esta zona, traidos hasta aqui por guias Maories. Curiosamente, en la isla sur no se ve tanta poblacion maori, se ve que preferian el clima del norte. En estos asentamientos se respira un cierto aire de melancolia por lo que fueron y ya no son; emisoras de radio con musica country, edificios abandonados, viejas minas y vias de tren, y cada dos por tres te encuentras negocios que se venden con carteles tipo "excelente inversion", "rentabilidad asegurada", ejem, no se yo hasta que punto.

La naturaleza, como no, sigue siendo aqui exuberante y te encuentras con cosas que no imaginaba. En las rocas de la costa puedes ver focas tostandose al sol y grupos de pequenos pinguinos azules, y sin embargo al otro lado de la carretera hay bosques con vegetacion subtropical, como por ejemplo la palmera kauni, la unica palmera que existe tan al sur. En estos arboles los pinguinos crian a sus pequenuelos. Al principio estaba desconcertado, siempre habia relacionado a estos animalitos con el hielo y las temperaturas extremas, y aqui ya ves, pinguinos conviviendo con palmeras; cosas de Nueva Zelanda.

El tiempo ha estado fenomenal, ventitres grados por el dia y nunca menos de quince por la noche; y nada de lluvia, siempre despejado. Estoy teniendo mucha suerte porque a esta zona conocida como Westland le suelen llamar "Wetland", ya que se lleva los records de lluvia de todo el pais. Eso si, una vez que llegue a Greymouth se anunciaban lluvias para la costa oeste y buen tiempo para el este, asi que me decidi por cruzar la carretera transalpina hasta el otro lado. En este pais hay que ser previsor y jugar un poco a huir dela mal tiempo.