" Cae el sol por el oeste,
brilla el lucero de la tarde,
las aves callan en sus nidos,
y yo he de buscar el mio ".
- William Blake -
Pues como dice este pequeno poema, asi ando yo, recorriendo kilometros de esta maravillosa tierra y buscando un sitio al final del dia donde aparcar mi furgoneta para pasar la noche.
Leigh, Whangarei, Paihia, Waitangi, Hourora, Bailis Beach..., sugerentes nombres que me han ido llevando poquito a poco hasta la punta norte del pais. No podria nombrar ningun sitio especial porque aqui la naturaleza es alucinante, detras de cada curva te encuentras con unos paisajes brutales; campos y colinas verdes donde abundan vacas y ovejas, bosques de arboles centenarios como el kauri, playas desiertas con un mar azul intenso... Ademas el tiempo ha mejorado mucho y ya estoy en mi salsa, chancletas y bermudas, aunque ayer y hoy ha llovido bastante y se ha metido la niebla, pero bueno, de no ser asi este pais no seria tan verde. Por lo menos no hace nada de frio.
La poblacion del norte es mayoritariamente maori. La verdad es que a primera vista impresionan un poco; rasgos polinesios, tatuajes por todo el cuerpo, algunos incluso en la frente y las mejillas, y un peso casi nunca inferior a los cien kilos, pero son gente de lo mas tranquila.
Hace un par de dias pude comprobar la hospitalidad neozelandesa. Llegue a un pequeno pueblo casi de noche buscando un camping para poder conectar electricidad a la furgo, pues necesitaba cargar la segunda bateria que hace funcionar el frigorifico y el motor del tanque de agua. Pregunte en el tipico almacen-gasolinera-supermercado-bar del centro, donde la gente acude al final de la tarde a hacer algunas compras y de paso tomar unas cervezas y charlar con sus vecinos. Me dijeron que el camping mas proximo estaba a unos cincuenta kilometros, pero un granjero que habia por alli me dijo que no me preocupara ( "no worries, mate" ). Me propuso pasar la noche en el terreno de su granja y coger electricidad de su establo, dicho y hecho. A la manana siguiente me desperto bien prontito con un suculento desayuno, unos huevos revueltos recien puestos por sus gallinas, y me lleno la furgo de frutas y verduras de su propia cosecha para seguir mi ruta. Grande Howard! Si algun dia vienes por las Canarias mi casa es la tuya.
Tambien he jugado el primer partido de rugby de mi vida, y todavia tengo el cuerpo molido. Les dije que no tenia ni idea de ese deporte, me dijeron que simplemente cubriera una zona en linea con mis companeros y que si cogia el balon lo pasara atras con la mano o le diera un patadon para adelante. Dicho parece facil, pero cuando conseguia coger el balon no me daba tiempo a nada, enseguida tenia a cuatro gorilas encima mio, y eso que tenian cuidado conmigo, pero en fin, echamos unas buenas risas.
El mar tambien lo he probado. Habia unas olitas preciosas en Tauranga Beach y alquile una tabla y un traje bien gordo por unas horas, muy bien, olas facilonas y locales amistosos, lo que pasa es que el agua esta bastante fria y despues de una hora me dolia la cabeza y los oidos.
Ahora me encuentro en Orewa. Es un lugar de veraneo para los kiwis y por estas fechas ya esta bastante animado, tenia ganas de un poco de civilacion despues de tanto sitio desierto. He metido la furgo en un camping, aqui son muy baratos y tienen unas instalaciones estupendas, y de paso aprovecho para hacer una buena lavadora y limpiar la furgo, que esta la pobre llena de polvo y barro de andar ayer por pitas polvorientas.
Manana sigo para el sur y pasare por la peninsula de Coromandel, que me han dicho que es alucinante. Es que hay algo feo en este pais?
